¿Qué fue de aquello?
¿De aquellos afanes de estudiar y leer sobre el personalismo?
¿De la ilusión por investigar y escribir?
¿De la facilidad para comunicar por escrito los proyectos, las realizaciones, los tropiezos, la superación y el esfuerzo?
Recuerdo a aquellos "patojos", hoy ya unos hombres maduros, que soñaban, y luchaban y compartían y se ilusionaban, y... hacían imposibles...
¿Qué fue de ellos? ¿Qué fue de aquello?
Si alguien lo sabe, por favor, que escriba... ¡Nos necesitamos! ¡Más en este año tan nuestro POR SACERDOTAL! ¡Que vuelen las plumas y no decaiga lo que nunca debe decaer. ¡Bueno,... si, les parece...
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P. Tomas Bartolomin -