He seguido en directo, por TV, la misa del Papa en Lourdes
Entre las dos misas que celebro en la parroquia en la mañana del domingo, he podido seguir en directo la misa del Papa en Lourdes.
Me ha emocionado la belleza de la liturgia, la afluencia de jóvenes, la gran cantidad de sacerdotes y obispos y la multitud de enfermos y de devotos de la Virgen.
Qué gran celebración del 150 aniversario de las apariciones. Ciertamente la Virgen se ha lucido en este siglo y medio, curando enfermos y sanando las almas de cientos y miles de peregrinos.
Me he sentido también peregrino hasta la gruta, que conozco por haberla visitado en dos ocasiones, y le he pedido a la Virgen que no deje solo a nuestro mundo, que nos sane de tantas dolencias del alma, que cuide a la juventud.
Qué emotivo ha sido el momento en que el Papa habló en su homilía de vocación sacerdotal. Los miles de jóvenes peregrinos, muchos de ellos españoles, le han aplaudido con ganas. Ojalá que esta llamada del Papa encuentre la gran respuesta que necesita la Iglesia de Hoy. Con la ayuda de la Virgen nos lloverán vocaciones. Dios lo quiera.
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