Magnífico Congreso bíblico
Magnífica la organización. Espectacular el lugar donde se celebra. Los ponentes, de grandísima altura. Todo inmejorable.
Me ha impresionado la exposición del Cardenal Ouellet, Prefecto de Obispos, y relator del Sínodo sobre la Palabra de Dios. Ha presentado la originalidad de la Verbum Domini con una precisión y claridad extraordinarios. La Palabra de Dios no es para especular, ha dicho, sino para entrar en dialogo con quien la pronuncia, Dios mismo. Pero sin intentar modificarla al propio gusto, porque la custodia y defiende la Iglesia. No está a nuestro abitrio, sino al cuidado de la Iglesia, que por eso tiene tanto cuidado y empeño en una adecuada traducción.
Somos más de setecientos congresistas. Hay gente de toda España. Mucho sacerdote joven, bastantes laicos, algunas monjas. Todos muy interesados, puntuales, copiando a tope, y aplaudiendo entusiasticamente a los magníficos ponentes.
Monseñor Martinez Camino, ha estado sintético, claro y muy animante. Don Domingo Muñoz, que ha presidido el comité técnico de la Biblia, ha recibido un aplauso interminable, porque nos ha expuesto con un entusiasmo extraordinario los entresijos de la elaboración del proyecto.
El Cardenal Rouco ha presidido una impresionante celebración de la Palabra de Dios, muy bien preparada y ha presentado el congreso con dominio y elegancia. Y todos los demás ponentes han estado de fábula.
Felicito a Don Jorge Juan Fernandez Sangrador, Director de la BAC y organizador del Congreso por lo bien que está llevando todo. Creo que se alcanza una magnífica cumbre en la historia del trabajo bíblico en España y se abre un futuro muy esperanzador.
¡Me alegro de haber venido! Digo yo como decía Don Makhartur.
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P. Tomas -