Paseo junto al río
Una tarde calurosa de verano da para mucho: para descansar, rezar, leer y pasear.
Hoy paseé con los Padres Alfredo y Maynor por la orilla del río Iregua y llegamos hasta su desenbocadura en el Ebro.
Pero, antes del paseo, pude leer un buen tiempo y reflexionar. Cuantas ideas, cuantos proyectos pueden salir de un tiempo de lectura. Ojalá la cultivemos aunque solo sea en las tardes calurosas del verano.
0 comentarios