Beato Pedro del Campo
Nació en Sorzano en 1493, donde se santificó viviendo como labrador y sacando adelante a su familia hasta los sesenta años, en que ingresó como lego franciscano en Barcelona, donde murió a los 99 años, el 5 de enero de 1592.
Destacó por su caridad con los enfermos, humildad, laboriosidad y por su profunda vida de oración y contemplación. Fue agraciado con dones de consejo y profecía y realizo en vida algunos milagros, permaneciendo incorrupta una de sus caritativas manos tras su muerte. Figura oficialmente como beato en el Martirologio franciscano.
Oración al Beato: Señor. Tú que otorgaste al Beato Pedro la gracia de imitar con fidelidad a Cristo pobre y humilde, tanto en su vida de labrador como de fraile franciscano, concédenos también a nosotros, por su intercesión, la gracia de vivir fielmente nuestra vocación, para que así tendamos a la perfección que tú nos has propuesto en la persona de tu Hijo. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Poemas al Beato: Naciste, Pedro, en Sorzano, luego a Monserrat te fuiste y en Barcelona vestiste el hábito franciscano. Allí ejercitó tu mano tan ardiente caridad, que en señal de tu bondad aún se conserva incorrupta, pues mereció tu conducta la fama de santidad. (Don Santiago Nobajas, párroco de Sorzano y natural del mismo pueblo, en La Rioja, año 1871)
Beato Pedro del Campo, quiero con amor rezarte: Tiéndeme, Pedro, tu mano, hijo humilde de Sorzano, para poder imitarte, viviendo esa caridad, que te permitió alcanzar la gloria de los altares. ¡Beato Pedro del Campo, haz de mí un buen cristiano! (A ngel Mª Pascual Pascual).
